Hace muy poquito tiempo que he
descubierto al grupo holandés Shocking Blue.
Lo que tienen las cosas, porque han pasado cuatro décadas largas desde que este
cuarteto triunfaba en el panorama rock internacional, pero la jungla musical es
vasta y ardua de explorar, y uno da para lo que da con su tiempo y sus recursos,
ambos limitados. Lo que más me llamó la atención de él en un primer momento fue
el parecido de su sonido con el de una banda que me atrae bastante, al menos en
sus primeros años: los estadounidenses Jefferson Airplane, y especialmente la
gran similitud de las voces de las respectivas cantantes de una y otra banda.
Todo esto no es casual, ya que el guitarrista y compositor Robbie van Leeuwen formó Shocking Blue
precisamente como respuesta europea a los Jefferson. Leeuwen había pasado por
varias bandas beat de su país cuando
decidió emprender una nueva aventura musical y crear una banda más próxima al
rock psicodélico que triunfaba en los EE.UU. La primera formación de Shocking
Blue consistía en el cantante Fred de Wilde,
el bajista Klaasje van der Wal y el batería Cor van Beek, además del propio Robbie, y con ella
apareció el primer disco homónimo del grupo, que tuvo un éxito discreto, en
1968. Fue entonces cuando Leeuwen tuvo la gran idea de intentar buscar una
“Grace Slick” en su país, y encontró este tesoro en la persona de Mariska Veres, una jovencísima vocalista de ascendencia
rumana que no sólo guardaba en común con Slick su larga melena negra y sus ojos
azules, sino también una poderosísima voz en contralto que, cuando entonaba los
temas que componía el guitarrista de los Shocking, remitía inevitablemente a la
música de Jefferson Airplane: basta con oír Love
Buzz, Water Boy o Send Me a Postcard (la primera canción
que oí de los holandeses y mi preferida hasta el momento) para encontrar las innegables
reminiscencias a la banda de Slick, por lo demás, como ya se ha dicho, algo
totalmente consciente y deliberado.
El gran momento de Shocking Blue
vendría, curiosamente y a pesar de las grandes canciones propias que tienen,
con una versión bastarda de The Banjo
Song del grupo norteamericano The Big Three (en el que militaba una aún
desconocida Mama Cass Elliot) a la
que titularon Venus.
El tema no sólo triunfó en media Europa, sino que llegó a nº1 en el mismísimo
Billboard estadounidense. Curiosamente, Tim Rose, compositor de The Banjo Song, nunca demandó a Van
Leeuwen, quizá porque él mismo también se inspiró para su canción en la
popularísima Oh, Susanna. A su vez, mucho
tiempo después, el grupo femenino de pop Bananarama repetiría el hito de los
Shocking Blue con una edulcorada y electrónica versión de Venus que también llegó a nº1 en 1986.
Shocking Blue, tras pasar del
sello Polydor a Pink Elephant después de su primer disco, publicaría seis LPs
más hasta 1974, momento en que su cantante decidió emprender una carrera en
solitario. Hubo, por supuesto, reencuentros ocasionales del grupo a lo largo de
los años, pero la muerte de Mariska Veres en 2006 destruye por completo la
posibilidad de que esto vuelva a ocurrir de nuevo.
Scorpio´s
Dance (1970)
Scorpio´s Dance fue el tercer LP de Shocking Blue y el segundo con
Mariska Veres. El vinilo original constaba de diez temas, dos de ellos (en
realidad, una variante del mismo) instrumentales, todos compuestos por Robbie
van Leeuwen menos Sally Was a Good Old
Girl que, mira tú por dónde, fue el mayor éxito de un personaje tan querido
por mí como Hank Cochran. ¡Cuántas casualidades y coincidencias!
Siempre que le hablas a alguien
sobre una banda o artista musical, te suelen hacer la misma pregunta, aunque planteada
de diferentes formas: “¿qué tipo de música hacían?”, “¿cuál era su estilo?”. Las
etiquetas en la música y en todas las disciplinas artísticas parecen ser
siempre necesarias para ubicar o catalogar a sus artífices de alguna manera,
pero por fortuna, ningún grupo o cantante suele atenerse exactamente a un solo
estilo y ofrece por suerte variedad y riqueza musical en sus trabajos. Dicho
esto, encontraréis casi siempre a Shocking Blue catalogado como un grupo de “rock
psicodélico”, pero en su repertorio también tienen cabida el garage, el blues rock, viejos temas
country y, en general, un rock bastante estándar y limpio que por supuesto
destaca la potente voz de Mariska Veres.
En la versión en CD del LP se
incluyen cuatro temas más repescados de singles de la época en la que apareció Scorpio´s Dance, entre ellos el enérgico Send Me a Postcard que me descubrió al
grupo y me puso sobre su rastro.
Scorpio´s
Dance (Pink Elephant, 1970)
CARA A
-Scorpio's Dance (First Movement)
-Alaska Country
-Sally Was a Good Old Girl
-Daemon Lover
-Scorpio's Dance
CARA B
-Little Cooling Planet
-I Love Voodoo Music
-Seven Is a Number in Magic
-Keep It if You Want It
-Water Boy
Canciones extras en la versión
CD:
-Send Me a Postcard
-Mighty Joe
-Hello Darkness
-Pickin' Tomatoes
Músicos
-Mariska Veres: Voz solista
-Robbie van Leeuwen: Guitarra, sitar
y coros
-Klaasje van der Wal: Bajo
-Cor van der Beek: Batería
- ?: Armónica, órgano
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