Hubo
una época de mi vida en la que andaba como loco detrás de películas de ciencia
ficción clásicas –entiéndase años 50: la Edad de Oro del género–. Hablo de la
década de los 80, en la que por supuesto no existía la inmediatez de internet y
los únicos recursos eran el VHS y la televisión. En el primer formato sólo
aparecían los títulos más conocidos, y a través de la segunda sólo en
determinadas ocasiones se podía ver algo de este material –inolvidable aquel
espacio de TVE llamado Alucine,
presentado por el gran Narciso Ibáñez Menta en las primeras horas de los
sábados, casi viernes–. Mi hambre tampoco quedaba satisfecha: ¡quería ver
tantos y tantos títulos sobre los que leía en libros y revistas! Curiosamente,
en este nuevo siglo XXI, en el que muchas de estas películas –la gran mayoría
enclavadas en el marco de la Serie B, algunas directamente Z– han aparecido en
ediciones digitales e incluso pueden encontrarse colgadas en la web, aquel
apetito juvenil por ellas prácticamente ha desaparecido en mí, y no han sido
muchas las incursiones en este subgénero que he realizado en los últimos
tiempos… Hasta hace poco…
No
hace mucho tiempo que descubrí el catálogo de la empresa L´Atelier 13, precisamente especializada en ciencia
ficción –a ellos les debemos también la reedición de la magnífica serie The Twilight Zone al completo, de la que
sí había comprado alguna temporada– y, fue comenzar a ver todos aquellos
llamativos posters añejos y coloridos –que tan a menudo proponían mucho más de
lo que luego daba el largometraje al que correspondían– con sus arcaicos
platillos volantes, estrambóticos robots y aún más estrafalarios monstruos y alienígenas,
cuando aquel antiguo interés por estos títulos volvió a despertar en mí: tenía
ganas de ver más de aquellas películas que tanto me llamaron en otra época. La
única traba con la que me encontré fue un precio que me pareció excesivo para
un DVD, más aún si tenemos en cuenta que algunos de los títulos de la colección
no son trabajos de destacable calidad artística ni enormemente populares.
Hablamos de 15 euros por disco, y sí, entiendo perfectamente que se trata de
ediciones limitadas publicadas por una empresa pequeña con mucho esfuerzo e
ilusión, pero eso no solventa de todas maneras mi situación económica, que no
me permite demasiados gastos. Por suerte, a poco que uno busque por
internet, puede dar con interesantes ofertas y precios alternativos para todos
estos films: yo los he encontrado a mitad de su precio, lo que me parece mucho
más accesible y aceptable (por supuesto, sé que hay opción de sacarlos todavía
más baratos, digamos que “gratis”, pero yo soy de esos antiguos que todavía
pagan por las películas).
La
colección de películas de ci-fi clásica de L´Atelier 13 consta por ahora de una
treintena de referencias entre las que se incluyen verdaderas joyas del género
como Los invasores de Marte,
La invasión de los ladrones de cuerpos o Tarántula, entrañables títulos menores como Regreso a la Tierra, The Deadly Mantis o Devil Girl from Mars y productos que
rozan o pasan lo infumable como la infame Plan 9 from Outer
Space, The Astounding She
Monster o la española El hombre perseguido
por un O.V.N.I. Como reza el eslogan de la colección, “lo mejor y lo peor
del cine de ciencia ficción.” Además, con cada película se incluye como bonus
un episodio de la serie de TV Tales of
Tomorrow.
De
momento, mientras pueda permitírmelo y me dure el interés, quiero ir haciéndome
con algunos de estos títulos. Ya he empezado con los dos primeros.
Para
más información: http://latelier13.es/peliculas/
Conozco estas ediciones de L'Atelier 13 hace siete u ocho años y tengo algunos DVDs comprados aunque es verdad que son caros. Hay muchos DVDs editados, tanto de terror como de ciencia ficción y unos cuantos packs. Me parecen pocos los 30 que nombras en el artículo aunque igual es que no mencionas a los que no se incluyen en la ciencia ficción sino en otro subgénero del fantástico como el terror.
ResponderEliminar30 son más o menos los que se ven en la página actual. Quizá otros hayan sido descatalogados con los años... Pero sí: me refiero a los englobables más o menos en la ci-fi cincuentera...
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