El fallecimiento de Sidney Lumet hoy a los 86 años enturbia el artículo que estaba preparando para el próximo miércoles 13, precisamente celebrando la longeva existencia de otro de los pocos directores clásicos que nos quedaban, Stanley Donen. Nuevamente nos toca llorar la marcha de un maestro del 7º Arte. Lumet, nacido un 25 de junio de 1924 en Philadelphia, Pennsylvania, EE.UU., se estrenó como director en la televisión de su país en el año 51. Debutaría en el cine seis años más tarde con la ya clásica 12 hombres sin piedad y, hasta 2007, cuando nos ofreció su último trabajo, la nada desdeñable Antes de que el diablo sepa que has muerto, trabajó incansablemente para la pequeña y gran pantalla. A él le debemos, entre otros títulos, Piel de serpiente (1960), Supergolpe en Manhattan (1971), Serpico (1973), Asesinato en el Orient Express (1974), Network, un mundo implacable (1976), Veredicto final (1982), A la mañana siguiente (1988), Negocios de familia (1989) y tantos otros grandes largometrajes, casi siempre en el terreno del thriller.
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