"Un hombre que limita sus intereses limita su vida" (Vincent Price)

martes, 23 de abril de 2013

Aniversarios fílmicos

Acostumbro a menudo a utilizar la fecha de algún aniversario significativo para traer a colación películas que han sido importantes en mi trayectoria cinéfila y dedicarles así algún artículo más o menos extenso en el blog. En este año, sin embargo, no tengo nada previsto en esta línea, pero sí quiero hacer al menos breve mención de unos cuantos cumpleaños fílmicos que se dan precisamente este 2013. Ahí van, en orden de veteranía….

Hace 60 años… un 2 de septiembre de 1953 William Wyler estrenaba Vacaciones en Roma (Roman Holiday) y con ella el mundo descubría a una de las más admiradas y queridas estrellas de la Historia del Cine: la deliciosa Audrey Hepburn. Ni qué decir tiene que yo no estaba por aquí en aquellas fechas, pero si descubriría a la película y a la actriz algo más de treinta años después, quedando para siempre hechizado por ambas. Es mi película favorita de mi actriz favorita, y uno de los filmes esenciales en mi vida, firme candidato, como ya dije, a venirse conmigo a una isla desierta si sólo pudiese escoger un largometraje para que me acompañara. (Véase mi homenaje aquí).

Hace 50 años… un 19 de junio de 1963, Don Chaffey dirigía uno de los más ambiciosos proyectos del mago de la stop-motion Ray Harryhausen: Jasón y los Argonautas (Jason and the Argonauts), obviamente inspirada en la leyenda de la mitología griega. Las escenas de animación de la cinta, especialmente el combate con los siete esqueletos, no tenían parangón ni precedentes en su momento, y aún hoy en día sigue siendo uno de los ejemplos básicos y clásicos que se estudian y se citan cuando se habla de la técnica de animación fotograma a fotograma. Tuve la suerte de verla en cine cuando se estrenó en España, con casi tres décadas de retraso, a raíz del éxito de Furia de titanes, en 1981. La considero la mejor película de Harryhausen, y creo que en ello coincido con su propia opinión. Otro nombre que ha sido esencial en mi vida de cine-adicto y de soñador irredento. (Tributo a Ray Harryhausen en este vínculo).

Hace 50 años… un 18 de septiembre de 1963, llegaba a las salas de cine estadounidenses The Haunting, adaptación de la novela homónima de Shirley Jackson por parte del genial director Robert Wise. Se trataba de una historia de fantasmas bastante compleja presentada con gran maestría que a mí logró sobrecogerme, sin mostrar absolutamente nada, sólo sugiriendo e insinuando, cuando la descubrí en televisión en los primeros 90. Fue probablemente la primera vez que se pudo ver en nuestro país –con el título La casa encantada–, ya que en su momento no llegó a las pantallas cinematográficas. La considero una de las obras maestras del cine de terror psicológico y la repasé extensamente en este artículo.

Hace 50 años… un 5 de diciembre de 1963, Audrey Hepburn volvía a deslumbrar al mundo con un maravilloso thriller en clave de comedia: Charada (Charade) en la que el director Stanley Donen nos metía de lleno en una intriga con obvísimas influencias hitchockianas en la que también participaba como protagonista masculino el gran Cary Grant. Seguramente, después de Vacaciones en Roma, es para mí mi cinta preferida de mi diva. La vi primero en los 80 en televisión, y algunos años después, en la misma década, la pude ver también en pantalla grande, todo un lujo. También la homenajeé este mismo año en esta entrada del mes de enero.


Hace 30 años… en 1983, coincidiendo con la fecha de estreno de la película original de la saga, 25 de mayo, George Lucas (productor) y Richard Marquand (director) cerraban la trilogía de La guerra de las galaxias con El retorno del Jedi (Return of the Jedi). No es mi favorita de las tres, más bien todo lo contrario, pero sí fue, de ese trío, la que más puede disfrutar en su momento porque ya estaba un poco más crecidito y pude verla varias veces en cine, comprar mucho de su merchandising y, posteriormente, hasta verla en VHS. Definitivamente, esta tercera entrega de Star Wars acabó por confirmar mi pasión por una saga que ha marcado mi vida, y que también repasé en dos entradas.

Hace 25 años… en 1988,  “coincidía” con el director francés Jean-Jacques Annaud por tercera vez en una sala cinematográfica para ver su más reciente obra, El oso (L'ours), estrenada en su país original un 19 de octubre. Ya me habían gustado bastante En busca del fuego y El nombre de la rosa, y esta extraordinaria película rodada con animales salvajes y prácticamente sin diálogos me encandiló y consagró al galo como uno de los mejores directores modernos en mi palmarés particular y cuyos trabajos intento siempre seguir.





Hace 10 años… un 1 de diciembre de 2003, el neozelandés Peter Jackson ponía fin a otra trilogía, la que adaptaba la novela de J.R.R. Tolkien El Señor de los Anillos con El retorno del rey (Return of the King), y yo acudía a verla en su estreno español dieciséis días después. Aunque en un momento de mi vida muy diferente y que no creo necesario comparar al del estreno de La guerra de las galaxias y sus secuelas, la de Jackson ha sido una saga que también he disfrutado muchísimo y en repetidas ocasiones, a pesar de que no soy precisamente un fan de la obra literaria original. Eso sí: tampoco esta tercera entrega es mi favorita de la trilogía (lo es la primera, que homenajeé aquí), pero tiendo a considerar las tres como un mismo film que debe por lo tanto valorarse como un todo. 

2 comentarios:

  1. Estoy impresionado como ha pasado el tiempo de rápido, ¡10 años desde la primer película del Señor de los anillos!...Pero así es la realidad, maravillosas películas, gracias por hacernos recordar mejores tiempos.

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  2. ¡Diez años desde la última! La primera tiene ya doce... Seguro que de aquí otra década vemos con cariño y nostalgia las películas de este 2013, así que... ¡disfrútalas sin prejuicios!

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