"Un hombre que limita sus intereses limita su vida" (Vincent Price)

domingo, 5 de julio de 2015

Elvis, la serie

En 1990, la cadena estadounidense ABC produce y estrena una serie sobre los comienzos artísticos de Elvis Presley sin más título que el nombre del cantante. Consta de 13 episodios de veinticinco minutos de duración aunque, según leo en algunas fuentes, sólo los diez primeros se emitieron inicialmente en su país de origen. No fue este el caso en España, donde Antena 3 ofrecería la serie íntegra y doblada un año después. Se emitía los domingos después de comer, y un servidor estaba todas las semanas con el vídeo preparado para grabar a esas horas.

La trama comienza poco antes de que Elvis grabe su primer single en Sun Records –exactamente un 5 de julio de 1954: hoy hace sesenta y un años de eso– y cubre unos pocos meses de la vida del Rey del Rock y de sus allegados. A menudo aparecen en ella flashbacks mostrándonos parte de la niñez del protagonista y, muchas veces, sirviendo como tema o motivo principal en torno al cual girará el episodio. Normalmente, es siempre la introducción de cada capítulo la que marca esta temática, como el episodio “Cuatro mulas”, en el que se establece una analogía entre dichos animales –que se han escapado de un cercado y no quieren volver– y los personajes principales, que se muestran igualmente tercos y obstinados cada uno en algún aspecto de su vida.

La serie fue creada por Rick Husky y coproducida, entre otros, por Priscilla Presley, y para el papel principal se eligió al actor Michael St. Gerard, cuyo parecido con Elvis se puede aceptar con el recurrido término de “razonable”, excepto quizá por sus grandes ojos algo bovinos que, además, no quiso camuflar con lentillas azules, puesto que los tenía marrones. En el reparto habitual encontramos también a Jesse Dabson como Scotty Moore, Blake Gibbons como Bill Black, Jordan Williams como Sam Phillips, Millie Perkins como Gladys Presley, Billy Green Bush como su marido Vernon, y Kelli Williams como Mattie Walker, la novia de Elvis del momento y el único personaje que no es enteramente real.Las canciones fueron grabadas de nuevo para la serie, siendo el cantante Ronnie McDowell el encargado de imitar –y con bastante fidelidad– la voz del Flash de Memphis.

En cuanto a rigurosidad histórica, Elvis contó con un importante y fiable asesoramiento, aunque evidentemente algunos hechos se dramatizaron y cambiaron. Sin duda uno de los más chocantes y aparentemente fáciles de resolver es la guitarra que lleva el actor que interpreta a Scotty Moore, que no es ni el modelo, ni siquiera el color de la original, un lapsus difícil de explicar.

Increíblemente, a pesar del arraigo que el cantante tiene en su país de origen, la serie no cuajó y no se renovó. Nunca ha sido editada en formato digital, aunque todos los episodios pueden encontrarse en youtube en versión original, y en otros lugares de internet doblados al castellano, aunque con mala calidad.

Un dato tan curioso como repetido, para terminar este pequeño recuerdo de esta serie, es que su actor principal, Michael St. Gerard –que interpretaría a Elvis en otras tres producciones diferentes– cambiaría la actuación por la religión al sentir la llamada divina en 1994…

No hay comentarios:

Publicar un comentario