"Un hombre que limita sus intereses limita su vida" (Vincent Price)

jueves, 7 de marzo de 2013

¡No estoy chalado!

O, al menos, hay más como yo. Me he quedado bastante más tranquilo al leer las primeras líneas de este artículo sobre Carole André escrito por el periodista Javier Memba para la web Descubrir el Arte, en donde compruebo que no soy el único que bebe por los vientos por alguna que otra actriz.... bueno, unas cuantas... algunas decenas, vale...

Comienza con el siguiente párrafo, y el resto lo podéis leer pinchando en el enlace:
Todas son dichosas. Pero de cuantas tareas entraña la cinefilia, no hay ninguna tan grata como la de adorar a las actrices. Es un amor aún más platónico que aquellos no correspondidos, a menudo por ignorados, que tan plácido dolor causan en la adolescencia. Y lo es porque, a la postre, se trata de suspirar por una ilusión aún más excelsa que la que nos inspiraba aquella que nos hacía ruborizar al sorprendernos mirándola: la chica cuyo florecimiento a la feminidad, en el pupitre de al lado, nos interesaba mucho más que las declinaciones latinas y el no menos nefasto valor de Pi.

2 comentarios:

  1. Ja, ja... Al menos no estás solo. Una locura compartida por muchos se convierte en normalidad.

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  2. ¡Que alivio no tener que estar solo en el manicomio!

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